Estamos en un mundo “científico”. Hoy se duda de todo menos de la ciencia. La ciencia da respuestas racionales de todo. Tan sólo ha surgido una sombra durante esta pandemia de la Covid-19.
De todas formas, la ciencia, como todos sabemos, se basa en hipótesis, que no están demostradas, si lo estuvieran no serían hipótesis. De alguna forma, aunque no queremos darnos cuenta, nos fiamos y mucho de algo que se sustenta en unos cimientos supuestos, y por ello relativamente frágiles. Es cierto que la experiencia nos dice que si no es así se le aproxima mucho, y al final funciona. Nos sirve.
El ADN. Parece la solución. ¿Qué somos? ¿de dónde venimos?, todas las respuestas están en el ADN. Una larga cadena de nucleótidos: adenina, guanina, timina y citosina. El orden de estos nucleótidos y sus relaciones, simplificando, nos hacen ser biológicamente lo que somos y nos diferencian de otros, a diversos niveles.
¿Qué somos?... somos los mismos con muy pequeñas diferencias. Somos la suma de todo lo que hemos sido. Esto se refleja en el ADN y se refleja en todo aquello que nos rodea y los signos que han dejado los que han pasado antes que nosotros por estos mismos sitios.
De ahí, que como no puedo fotografiar el ADN, fotografío para esta serie los signos que nos enseñan qué somos. Desde los dólmenes hasta hoy hay muchos signos escritos o implícitos en las piedras, que son lo que permanece.
La selección de estás fotografías de la serie Litografía está ordenada cronológicamente y después de verlas puedes pensar que somos muchos en uno. Tenemos un poco de todos los que nos han precedido.
Ante está curiosidad decidí hacerme una prueba de ADN para ver a qué etnias pertenezco, o de qué trozos estoy hecho. La empresa que los realiza distingue los resultados entre 42 etnias y te da unos porcentajes según tu ADN. Y el resultado no resultó excesivamente sorprendente: soy un 90,8% Ibérico, como era de esperar (lástima que no distingan dentro de la etnia ibérica en los diferentes pueblos que habitan la península). Pero por aquí han pasados otros personajes a lo largo de la historia y tengo unas trazas de otras etnias, según el estudio de la prueba: 6,8% Judío Askenazí (judíos de la zona de Alemania y alrededores), 1,3% Griego y sur de Italia y lo mas sorprendente es un 1,1% Finlandés.
Sólo piedras. Inertes.
Piedras rubricando su historia.
Relato silencioso, silencio lapidario.
Muda y acromática elocuencia. Afónicas, atónicas, afásicas.
Nada de más. Tan sólo piedras.
Esta galería contiene algunas fotografías en blanco y negro de la serie fotográfica Litografía.
Son imágenes tomadas en Navarra, pero podría ser cualquier otro lugar. Con grandes desenfoques. No me importa el fondo, está ahí y ya está. Es el protagonista de la historia, pero queda escondido. Son piedras que cuentan. Relatan historias.
¿Qué soy?... Todo esto, nada menos. Por aquí han pasado y se han quedado muchos, que han ido configurando nuestra forma, nuestra historia desde antes de ella.
En el fondo tan sólo son pequeños signos que nos hablan de otros que estuvieron aquí antes que nosotros, y dejaron grabado en piedra su paso. ¡Si pudieran hablar las piedras! Hombres y mujeres como nosotros, aunque anteriores.
Fueron construyendo esta tierra, y todas las tierras.
Signos que nos hacen iguales. Nada de nada. Tan sólo piedras...